Los cambios generados por las estaciones del año, por la luz del día o por la ausencia de ella son lo que se denomina trastorno afectivo emocional, pero existe otro trastorno derivado de los fenómenos atmosféricos. Así existe un gran número de pacientes que sienten pánico o terror al sol, a la lluvia, a la luna u otros efectos relacionados.
Podría parecer que, al hablar de una fobia común, pero decir que es desconocida nos estamos contradiciendo, pero no es así. Al hablar de tripofobia mucha gente no sabrá el tipo de fobia a la que nos referimos, básicamente podemos decir que es la repulsión que siente un sujeto a la repetición de agujeros en un objeto.
Identificamos de forma más natural los síntomas del estrés y trastornos de ansiedad, miedos, fobias y todo tipo de males psicológicos en las personas adultas. Pero no hay que obviar este tipo de problemas en la edad infantil. De hecho, la única diferencia de la presencia de estrés en un niño se encuentra en los síntomas. Esto se debe al proceso de maduración y la etapa de desarrollo en el que se produzca el problema.
El uso excesivo de la tecnología sea por motivos laborales o bien por ocio también puede ser nocivo para nuestra salud mental. Es el denominado tecnoestrés que nos puede generar ansiedad, fatiga o incluso conductas agresivas. En este apartado cobra especial importancia la nomofobia o miedo irracional a quedarse sin el teléfono móvil que no creamos que afecta sólo a los jóvenes.